Pesadilla de Benedetto: lo tenía para ganar y se fue llorando

El Pipa pateó a las nubes el quinto, con el que pasaba Boca. Tras ser eliminado, se fue a pura lágrima.

Cerca de la medianoche, Darío Benedetto se iba de la Bombonera a pura lágrima. Era para llorar, igualmente así fue a saludar a los hinchas, que lo bancaban pese a todo. ¿Y qué es todo? Los dos penales que erró en su partido número 100, el primero en el primer tiempo y el segundo en un momento más importante. Porque Pipa se quedó con el quinto y, si lo metía, Boca pasaba a cuartos de final de la Copa Libertadores.

Pero Pipa, presionado por haberle dado al palo en el PT, pegándole con el empeine externo, esta vez buscó darle con más furia. Tanta que fue uno de los peores penales vistos en los últimos tiempos, con la pelota en la segunda bandeja de la Bombonera. De no creer. Agustín Rossi había atajado dos, Benedetto por eso tuvo la chance de meterla y darle la clasificación a Boca. Sentenciado por una noche que fue pesadilla para él y para los hinchas.

El penal del Pipa: fue palo (Reuters).

Después del penal a la tribuna hubo más. La metió Varela, también Óscar Romero, pero falló Ramírez al atajárselo Casio. Y Benedetto quedó marcado y golpeado por una noche de terror.

Fue un mal partido de Pipa, peleado con la red. No la metió en el juego, estuvo lejos del área y tuvo la chance de dos penales. En la definición con Racing, por el torneo, la pelota había entrado justo en la definición. Ahora le pegó al palo y, cuando Boca podía pasar de ronda, la tiró a las nubes.

La gran chance que había tenido el Pipa fue a los 18 minutos, Boca contó con una situación clarísima para ponerse en ventaja ante Corinthians, en el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Libertadores. Luego de un jugadón de Exequiel Zeballos, Darío Benedetto desperdició lo que era el 1-0: pero definió de lujo y la tiró afuera.

El dolor en la despedida. (FERNANDO DE LA ORDEN)

¿En qué falló el punta? Completamente solo dentro del área de Cassio, Benedetto le dio con una tijera desde el piso y el remate no fue ni al arco. Sin ningún marcador cerca, tenía tiempo para buscar una definición menos lujosa pero más efectiva: podía hasta pararla para intentar un mejor remate.

La definición de Benedetto en el PT.

El delantero, que en la previa hizo una una fuerte arenga, se podría haber sacado la espina unos minutos después… Fue él quien se hizo cargo de penal que sancionó Andrés Matonte, luego de chequear en el monitor del VAR la agresión de Raul Gustavo a Pol Fernández. Desde el punto penal, Benedetto no anduvo con vueltas: le dio con alma y vida, pero su derechazo terminó en el poste.